EJERCICIO DE VISUALIZACIÓN. Técnica para el éxito

Hoy quiero presentarles una técnica muy útil para la vida diaria. Se trata de la técnica psicológica de la visualización.

Esta herramienta puede ayudarnos a prepararnos mentalmente para afrontar nuestros miedos y/o  situaciones futuras que nos angustian.

La visualización consiste en imaginar una situación temida, de forma que podamos mentalmente afrontarla y superarla.

Esta técnica psicológica es muy utilizada para entrenar a deportistas profesionales de forma que puedan mejorar su rendimiento deportivo. También es muy habitual en el tratamiento de fobias o miedos .

¿Qué tipo de miedos podemos visualizar? Por ejemplo hablar en público, afrontar un examen oral, acudir al médico, dar una opinión en una reunión, conducir un coche, etc. Es decir, cualquier situación que nos genere incomodidad.

Cuando imaginamos una situación nuestro cerebro no diferencia entre la situación real y la imaginada. Es por ello que la exposición a una situación temida en imaginación es tan útil como si afrontáramos esa experiencia en realmente.

El objetivo de este ejercicio es asociar emociones positivas y sensación de control,  a la situación estresante que imaginemos.

La intención es por lo tanto, que nuestros miedos se hagan más pequeños y que nosotros nos sintamos más capaces. De esta forma podrás disminuir la angustia que ciertos recuerdos o situaciones imaginados te producen.

Por el contrario, si anticipamos mentalmente que la situación futura ( como por ejemplo una entrevista de trabajo) nos saldrá mal entonces, ya que imaginar el fracaso nos predispone negativamente y acudiremos a la cita con una sensación de inseguridad mayor, que bloqueará nuestros recursos haciendo que se cumpla nuestras expectativas de fracaso..

Antes de hacer el ejercicio, puedes escribir esa situación que te atemoriza en un folio. Cuantos más detalles describas más realista será el ejercicio.  Tómate tu tiempo, no lo hagas rápido.

Puedes elegir la situación que más se repita o que más te abrume. Ésta puede ser un recuerdo o una situación futura que aún no se haya dado. Lo importante es que elijas una situación que te preocupe o cause miedo.

Ahora, busca un lugar tranquilo donde no te interrumpan y colócate en una postura cómodo/a. Puedes utilizar una música relajante si lo prefieres.

A continuación cierra los ojos y realiza tres respiraciones profundas para comenzar a relajarte.  Mantén durante todo el ejercicio una respiración lenta y pausada.

Primero procura verte a ti mismo/a desde una sentimiento de seguridad, fuerte y poderoso/a. Verbalizarás mensajes como “estoy preparado/a” “puedo hacerlo” “éste es mi momento” y dirígete hacia ese lugar o situación.

Poco a poco comienza a visualizar, con todo lujo de detalles esa situación o experiencia (puedes verbalizarlo en voz altas para que te ayude a concentrarte y hacerlo más realista). Procura que sea lo más realista posible. Fíjate en las pequeñas cosas para tener la sensación de estar realmente allí.

La respuesta de ansiedad vendrá pero es muy importante que no interrumpas el ejercicio cuando eso ocurra. Para que este ejercicio funcione debes continuar, y ayudarte para ello de la respiración. Procurando mantener  un ritmo lento y pausado sin intentar distraerte o quitar esa imagen de tu mente.

Imagina poco a poco como ejecutas esa situación, paso por paso. Mantente atento/a a lo que estás haciendo y no a los pensamientos que puedan invadirte. concéntrate en la acción. Imagínate actuando adecuadamente. Afrontando con éxito esa situación sin evitarla. Viéndote a ti mismo/a sacar lo mejor de ti mismo/a.

Tómate un tiempo para imaginar esa sensación de superación, de éxito, de satisfacción y de orgullo por haber superado esa circunstancia. ¡Disfrutalo!

Una vez que llevemos un tiempo considerable y siempre que tu ansiedad haya disminuido (nunca antes) puedes ir poco a poco finalizando el ejercicio, abandonando la situación después de haberla superado. Cuando nos hayamos visto a nosotros mismos superando la situación.

El objetivo de la técnica de exposición es crear un ambiente seguro en el que puedas reducir la ansiedad, disminuir la evitación de situaciones temidas y mejorar tu calidad de vida.

Esta es una forma de derribar barreras mentales y entrenarte para tener éxito, no porque la situación se vaya a producir tal y como la imaginas sino porque la afrontarás desde la seguridad.

Espero que este ejercicio te ayude y recuerda que la habilidad se adquiere con la práctica. SI no practicamos no podremos beneficiarnos de estas estrategias tan útiles y sencillas para la vida diaria. ¡Podemos reprogramarnos para tener éxito!

En el siguiente vídeo podrás ver como unos alumnos simulan realizar esta técnica en una consulta de psicología con un recuerdo doloroso.

¿Miedo a la crítica? ANSIEDAD SOCIAL

¿Miedo a la crítica? ANSIEDAD SOCIAL

Fobia

Aunque el sentir ansiedad en determinadas situaciones sociales es algo relativamente frecuente entre la gente, dicha ansiedad no suele causar una interferencia elevada en su vida diaria.

Para saber si tienes ansiedad social es necesario establecer con qué frecuencia la experimentas, con cuánta intensidad, cuánto dura ese episodio de ansiedad y qué cosas haces para evitarla. Antes de empezar con el plan de acción, debemos entender tu ansiedad.

La característica principal de la fobia social es el miedo intenso a que los demás que te observan te evalúen negativamente. Esta ansiedad surge porque uno desea crear una determinada impresión en los demás pero duda de su propia capacidad de tener éxito.

Es importante destacar que las personas que padecen este problema saben que su miedo es desproporcionado o poco razonable pero afrontar la situación que tanto teme dispara su ansiedad.

Situaciones como asistir a una fiesta, hablar en público, hablar con personas con autoridad, etc. Frecuentemente son temidas por las personas que conviven con la ansiedad social, por ello evitarán a toda costa estas situaciones. Esta evitación constante es la que les genera problemas en su vida diaria.

Evitar las situación estresante reduce temporalmente la ansiedad y ese es el motivo por el que la persona empieza a dejar de hacer cosas. Pero esta huída mantiene el problema porque hace difícil aprender que la situación temida no es peligrosa.

La persona que espera sentirse incómoda en la primera cita o en una entrevista laboral probablemente está en lo correcto, pero la persona con fobia social cree que no será capaz de afrontarlas adecuadamente, ve un peligro porque considera que no tiene las habilidades necesarias.

¿CÓMO TRABAJAR ESTA DIFICULTAD CON UN PSICÓLOGO?
A) El primer paso es recabar información. Existen cuestionarios para evaluar la gravedad de la ansiedad y de los comportamientos de evitación, aunque también son muy útiles los autorregistros para que la persona anote con detalle las situaciones temidas y sus reacciones.

B) Psicoeducación: Es importante también que el psicoterapeuta explique el mecanismo de ansiedad y de la fobia social para que la persona entienda lo que sucede.

C) Establecer objetivos: Se establecen conjuntamente paciente y psicoterapeuta, los objetivos que se pretenden conseguir y se explican las técnicas que se emplearán como la relajación, la exposición a las situaciones temidas, el entrenamiento en habilidades sociales y la reestructuración cognitiva.

El pensamiento de «intentar caer bien a todo el mundo» y «tener que ser aceptado siempre de forma incondicional por todos aquellos que le rodean» es muy típico de las personas que padecen fobia social porque son muy sensibles a los comentarios críticos.

ENTONCES, ¿CUÁL ES EL TRUCO PARA SUPERAR LA FOBIA SOCIAL?
Después de entrenar técnicas de relajación y estrategias para identificar los pensamientos desproporcionados o poco realistas, la persona se enfrentará progresivamente a las situaciones temidas para afrontarlas con éxitos y debilitar la ansiedad que produce.

Como puedes ver solucionar problemas de esta magnitud no se puede hacer sin esfuerzo y sin cambiar hábitos o rutinas, generalmente superar un problema requiere ambas cosas (quienes ofrecen soluciones mágicas son ilusionistas que quieren enriquecerse).

Los psicólogos te ofrecemos estrategias y nuestra compañía profesional en un proceso de aprendizaje, un camino hacia la superación personal que te llevará a empoderarte, a sentirte más hábil y más fuerte, pero necesitaremos tu voluntad de cambio, tu perseverancia, y tu confianza para ello.

Fuente bibliográfica: Manual para el tratamiento cognitivo-conductual de los trastornos psicológicos. Vicente Caballo